Es un yôkai anciano experto en el arte de forjar espadas. Fue él el que creó las espadas Tessaiga y Tenseiga por orden de Inutaisho, quien planeaba dárselas a sus hijos.
Vive en en una montaña con temperaturas muy elevadas, lo que dificulta el acceso para personas que no soportan ese calor (como humanos). En una 'casa' hecha de huesos. Tiene un yôkai-toro con tres ojos, que mayormente utiliza como medio de transporte, llamado Mô-mô.
Totosai tiene la capacidad de emanar fuego por su boca, habilidad que le sirve mucho como forjador (para ablandar los metales) pero que también puede servir para atacar. Su otra herramienta para fojar un gran martillo, mediante el cual golpea el metal para darle forma.
Como creador de ambas espadas, Totosai sabe todos los secretos de estas: sus utilidades, capacidades y su modo de empleo.
Cuando conoció a Inuyasha, se decepcionó de ver que su espada había caido en manos de alguien "tan poco hábil" como Inuyasha. Sin embargo, Inuyasha, con mucha práctica, logró ir dominando las diversas técnicas que la Tessaiga escondía, además de ir adquiriendo otras nuevas más.
Tuvo un discípulo, llamado Kaijimbo, el cual se volvió un forjador de espadas maligno y creó la Tokijin, la otra espada de Sesshomaru, la cual tenía un aura tan maligna que incluso poseyó a Kaijimbo.
Totosai no aparece mucho en el Anime o en Manga, pero cumple un rol importante. En una ocasión, la espada de Inuyasha fue partida por una de las extensiones de Naraku llamado Goshinki, y fue Totosai quien, utilizando uno de los colmillos de Inuyasha, logró reconstruir la espada. También reforjó (en el Manga) la Tenseiga, espada de Sesshomaru, para dotarla de un nuevo poder para 'abrir puertas' al mundo de los muertos.
